10 consejos para cuidar la piel en invierno
El frío, el aire, la lluvia, la humedad, los contrastes de temperatura… en invierno nuestra piel sufre y debemos cuidarla como se merece. Además de hidratar nuestra piel con cremas nutritivas de día y de noche, también debemos tomar otra serie de medidas. A continuación en Granafarma, farmacia online, te damos 10 consejos imprescindibles para cuidar la piel en invierno.
De igual forma que adaptamos nuestro armario a la llegada del frío, nuestra rutina de cuidado facial debe responder a las necesidades de nuestra piel en invierno. El frío, el viento, la humedad, la calefacción o los contrastes de temperatura son factores que promueven la sequedad de nuestra piel y aceleran el envejecimiento prematuro. Para evitarlo, hay una serie de pautas que te ayudarán a proteger tu piel y mantenerla hidratada durante todo el año.
¿Qué encontraré aquí?
Cuida tu piel en invierno
Nada de agua caliente
Evita el agua muy caliente porque, aunque sea lo que más apetece en invierno, deshidrata mucho la piel. Además, favorece la pérdida de lubricación. ¿Lo mejor? Las duchas y los lavados deben realizarse con agua templada. Además, tampoco olvides secarte muy bien después del baño.
Cuidado con los productos que contienen ingredientes abrasivos
Apuesta mejor por productos con ingredientes que respeten tu piel y sean suaves con ella. Los resultados serán visibles en cuestión de días.
Fórmulas enriquecidas
Existen productos especialmente pensados para proteger la piel del frío y que, además, nutren en profundidad. Los productos que contienen ácido hialurónico son muy recomendables. Puedes descubrir los mejores productos para el rostro en nuestra farmacia online.
Hidratación diaria día y noche
Recuerda hidratar tu piel por la mañana y por la noche (por ejemplo, después de cada baño). Este paso es fundamental para lucir una piel suave, lisa, joven e hidratada.
Cuidado con la exfoliación
Si tienes la piel reseca o demasiado sensible, cuidado con la exfoliación. Debes realizarse con suavidad y no más de una vez a la semana.
Usa el protector solar
La protección solar no solo es cosa del verano. Debemos utilizar protección solar a diario durante todo el año: los rayos del sol siguen incidiendo en tu piel aunque las temperaturas sean más bajas.
Cuida especialmente las zonas sensibles
Los labios son la zona más sensible de nuestro rostro en invierno porque tendemos a humedecerlos para sentirlos menos tirantes, pero es una mala idea ya que eso los irrita aún más. Para evitarlo, ten siempre a mano un bálsamo labial hidratante.
Atención especial a las manos
Las manos suelen ser las grandes olvidadas de nuestro cuerpo, cuando en realidad no debería de ser así. En invierno nuestras manos sufren más, por no hablar de los sabañones, así que utiliza crema de manos nutritiva a diario, usa guantes y evita los cambios bruscos de temperatura. Y también hacemos mención especial a los codos, las rodillas y los pies, que suelen ser zonas que también se resecan con facilidad.
Limpieza facial
La limpieza facial debe realizarse con los productos adecuados para ayudar a tu piel a hidratarse en profundidad. Descubre más sobre cómo debe ser una correcta limpieza facial.
Masajes faciales
Los auto-masajes faciales para activar la circulación son la guinda del pastel. Si quieres ir un paso más allá y completar una buena rutina de cuidado, apuesta por incorporar ejercicios que ayudan a combatir bolsas y ojeras y estimular la circulación.
